FRANCISCO ROS
Uno de los mas grandes estadistas del siglo 19 y principios
del 20. Ningun politico de nuestros tiempos puede asemejarse a hombre como
Francisco Ros. A pesar de no ser nacido en Minas, dio a esta ciudad y este
departamento una importancia mayuscula para el desarrollo del Uruguay.
Senador, diputado, topógrafo e historiador, de múltiple y vasta labor
intelectual.
Hijo de un comerciante catalán de su mismo nombre y de Juana
Rivero, de Maldonado, era nacido en Montevideo el 10 de abril de 1855.
Desde joven, no sólo demostró buenas condiciones de
estudiante en el colegio de los Escolapios, sino también afición al dibujo, que
le permitió obsequiar al coronel Angel
Muniz con un retrato hecho de su mano.
Recibido de Agrimensor en el año 1872, colaboré en la revista
del Club Universitario y vinculado después al Ateneo, figuró en sus Juntas
directivas y fué desde la tribuna de esta casa donde principió la campaña iva
que iba a orientar toda su vida: la solución por las costas del Este del
problema de la vialidad nacional, estableciendo un frente marítimo atlántico
cuyo centro debía estar en el puerto de la Coronilla, en el departamento de
Rocha.
Blanco y luego nacionalista, participó en trabajos
revolucionarios contra el gobierno de Santos en 1886, estando emigrado en el
Brasil
Fundador, con los doctores Gil y Fiaggio, del diario
"La República”, aparecido en 1807, no figuró en cargos políticos hasta la
presidencia del Dr. Herrera y Obes en el año 1891,
en que vino de diputado por el departamento de Cerro Largo a
la l7 ª legislatura, como candidato que prestigió y votó un "Centro
Nacionalista Autonomista", presidido por Juan Collazo, caudillo local
vinculado al coronel Justino Muniz. No fué reelecto, pero reingresó a la cámara
en la legislatura 19ª, durante la presidencia de Idiarte Borda.
La revolucion nacionalista de 1897 y sus inmediatas
derivaciones influyeron en la orientación política de F. ROS dentro de las
filas partidarias, lo llevaron a figurar en 1898 entre los enemigos del mismo
régimen en cuya legislatura había formado.
Derrocada la Asamblea Nacional por Juan L. Cuestas,
presidente del Senado en ejercicio del Poder Ejecutivo, por el golpe de fuerza
del 10 de febrero de 1898, el dictador le reservó, en e1 Consejo de Estado que
se creaba con igual fecha, el puesto
número 29 en la lista que incluía treinta ciudadanos
nacionalistas y constitucionalisas.
Volvió a la cámara como diputado por Treinta y Tres el año
1902, pero con motivo del alzamiento en armas de su partido en 1904, se le
declaró cesante el 27 de agosto.
Senador reelecto por Rocha en 1907, hizo dimisión de su
banca tres años después por motivos políticos. Volvió a ser diputado por
Montevideo en el trienio 1020 - 1923, y en 1929 ocupaba de nuevo la senaturía
de Rocha en calidad de suplente.
Una bibliografía que consta de varios títulos, entre los que
predominan los atinentes con la vialidad del Este, probarán en cualquier tiempo
el espíritu de trabajo que animó a este ciudadano meritísimo, constantemente al
servicio del país.
A estos escritos especializados se añade todavía el fruto de
sus excursiones por el campo de las investigaciones del pasado nacional, habiendo
sido el primer presidente del Instituto Histórico y Geográfico, al organizarse
esta casa de estudios en 1913.
Cartógrafo, dibujó con mano prolija múltiples planos y
mapas, y, cultor de letras puras, dió a la imprenta, bajo el seudónimo de
Alvaro Zapicán, una novela de ambiente
criollo y corte naturalista titulada "Del Linaje",
ensayo que, pese al aspero sentido de proselitismo político que en él campea,
es muy superior en todo sentido a otras que
han logrado sobrevivir, aunque sea en el recuerdo.
Falleció en Montevideo el 23 de junio de 1931.